#263: Entrevista a Eliana - 2012-03-20

No más de cinco minutos demoró Eliana en arreglarse para la entrevista. Todos los invitados quedaron asombrados por la rapidez con que Eliana cambió su pijama y cabello desordenado por una tenida formal y una trenza muy complicada. Sin embargo, a Gastón no le pareció bien la idea.

- " Eliana, creo que no está bien que estés tan producida. Nosotros somos "El Pantano", no "El Centro" (un periódico de la región), no es necesaria tanta formalidad con nosotros. "

- " ¡Pero si voy a dar una entrevista, si voy a aparecer en público, quiero dar una expresión de seriedad, para que los jóvenes sepan que esto de ser profesora no es chacota! "

- " ¡Por supuesto que no es chacota, " - agregó Eduardo - " pero estamos en tu casa, queremos conocer más de tu lado personal! "

- " No tengo mucho que decir sobre mi vida privada. Soy una persona bastante fome, en realidad. Sólo destaco por mis estudios y por esto que estoy haciendo ahora... "

- " Y por tu pelo. " - agregó Andrea - " No deberías haberte esmerado tanto por ocultar tus atributos. La timidez te cierra muchas puertas. Lo sé por experiencia... "

- " ¡Ahora resulta que soy famosa por mi pelo! Oh, Dios... ¡quería mantener un bajo perfil! "

- " ¡No seas tan egoísta, Eliana! ¡Si supieras lo que muchas de mis compañeras darían por tener un cabello como el tuyo! "

- " Er... tener el cabello así de largo no es para cualquiera. Se necesita mucha paciencia, dedicación y cuidado. La mayoría de las chicas no podría, se aburrirían de cargar con semejante peso sobre sus cabezas. ¡Además... está el problema de los piojos! "

- " ¿Tienes piojos? "

- " ¡No, por Dios! ¡Cómo se te ocurre! Pero es una de mis peores pesadillas. Soy muy maniática, puedo saber casi de inmediato quién tiene piojos y quién no. "

En eso, Eliana lanza una profunda mirada de desprecio en contra de Eduardo. Para él, fue peor que si lo hubiesen agarrado a patadas en el suelo.

- " ¿Pero no arrastras el pelo en el suelo? ¿No se te ensucia? "

- " Cuando chica lo arrastraba, ahora soy más cuidadosa. Igual, cuesta que se ensucie... pero espero que no vengan a entrevistarme por mi pelo. "

- " ¡Es que es imposible ignorar semejante cabellera! ¿Sabes? Creo que deberías deshacerse esas trenzas. Queremos ver tu cabello en todo su esplendor. Por favor, Eliana, el público lo pide. "

Gastón y Eduardo sonrieron y asintieron con la cabeza. Eliana se sentía intimidada.

- " Ya, está bien. Me desharé la trenza. Supongo que... " - Eliana comenzó rápidamente a reordenar su cabello - " ... querrán una foto de portada para su pasquín. "

- " ¡Por supuesto! ¡Queremos que te sientes y que dejes tu cabello suelto alrededor tuyo! Hay, eso sí, que probar con varias poses y dejar la que mejor salga en la foto. "

- " Como digan. "

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Eliana Martínez, y sus 210 centímetros de cabello.

- " ¡Perfecto! " - exclamó Gastón. Ahora, ponte de pie y sácate la chaqueta. Queremos una pose que resalte tu figura esbelta. "

- " ¿Qué? ¡No! "

- " ¿No? ¿Por qué? "

- " ¡He leído "El Pantano", y la verdad es que no pueden poner tantas fotos en un espacio tan pequeño! ¡Sólo necesitan una! "

- " Pero Eliana, una de recuerdo... "

- " ¿Acaso te gusto? " - preguntó Eliana a Gastón, muy molesta.

- " Bue... este... no, eres muy niñita para mis gustos. A mí me gustan más... creciditas. "

Andrea miró hacia otro lado, sintiéndose aludida. A pesar de que hace ya varios días que estaba saliendo con otro chico...

- " Entonces no necesitas más fotos. "

- " Cierto. ¡Pero si la foto sale mal, tendremos que volver! "

- " Ya, ok. Bueno, ¿y? ¿Cuándo empezamos la entrevista? "

- " ¡Creo que será mejor empezar inmediatamente! " - Señaló Andrea. Los tres sacaron sus cuadernos para revisar sus apuntes y la pauta.

- " Listo, Eliana. " - comenzó Andrea - " Para empezar, danos una pequeña presentación personal sobre ti. "

- " Mi nombre es Eliana Martínez, tengo 11 años y soy alumna del sexto año "A" de la Escuela [...]. "

- " ¡Tienes el cabello muy largo y muy lindo! ¿Cuánto mide tu cabello? ¿Cómo llegaste a tenerlo así? ¿Tienes algún secreto que puedas compartir con las lectoras de "El Pantano" para tener un cabello hermoso? "

- " Sabía que iban a preguntar. La verdad es que no estoy segura de por qué me crece el cabello tan rápido. Ciertamente no es algo normal, no creo que a otra persona le pueda crecer el cabello así. Pero me gusta, y trato de cuidarlo lo mejor que puedo. "

  " Secretos en realidad no tengo muchos más que alimentarme en forma sana y mantener un nivel saludable de actividad física. También masajear el cuero cabelludo de vez en cuando con palta y huevos. Es necesario estimular el flujo sanguíneo al cuero cabelludo, y una buena dosis de proteínas y nutrientes en la dieta. "

- " ¡Pero eres tan delgada! ¿En verdad que te alimentas bien? "

- " Por supuesto que sí. Es que también gasto mucha energía. Con lo que como todos los días debería estar pesando más de treinta kilos. Quizás sea que mucho de lo que como se me va al cabello... "

- " ¿Cómo llegaste a ser profesora de Matemáticas? ¿Qué pasó con el profesor de Matemáticas que tenían ustedes? "

- " Hasta el año pasado, teníamos una profesora muy buena, se llamaba Matilde Arrigorriaga. Pero ella por alguna razón dejó de trabajar en la escuela, y trajeron una profesora nueva, una que se llamaba Leticia Pizarro. La profesora Leticia era muy joven, creo que recién egresada, no sé si habrá hecho clases antes pero tuvo muchos problemas, se le olvidaban las cosas y se equivocaba en cosas muy sencillas. Duró un mes con nosotros y renunció. "

  " El viernes 31 de Marzo en la tarde, el director de la escuela me llamó por teléfono para que fuera a la escuela a hablar con él. Fui con mi mamá, y ahí nos contó que quería que yo me hiciera cargo de los niños durante las horas de Matemáticas que tenía la profesora Leticia, para que no quedaran solos sin profesor. Primero empecé haciendo ejercicios y repasos, y pronto empecé a hacer clases como si fuera una profesora de verdad. "

  " Un día llegó un estudiante de pedagogía, y yo le tuve que "mostrar el camino" para que él supiera cómo hacíamos las clases. Después de la segunda clase de la mañana él huyó desesperado. Ya llevo un mes a cargo de las clases de Matemáticas de cuatro cursos. Ahora renunció un profesor que hacía clases en la tarde; seguro tendré que reemplazarlo... "

- " ¿Cómo ha interferido tu nueva actividad con tus clases? ¿Cómo lo haces con tus tareas y pruebas? "

- " Hay algunas horas que tengo libres, pero en esas horas yo usualmente planifico mis clases y hago otras tareas administrativas. No me queda tiempo para asistir a las clases de mi curso, así que durante este mes me han dado algunos trabajos con nota para la casa. Cuando llegue un nuevo profesor, voy a tener que hacer todas las pruebas que tengo pendientes. "

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Eduardo Sepúlveda, Andrea Méndez y Gastón Jiménez.

- " ¿Qué ha significado para ti ser profesora? ¿Te gusta enseñar? ¿Qué es lo que más y menos te gusta? "

- " Siempre supe que era muy difícil ser profesora, pero hay que estar ahí para realmente saber lo que se siente. Es un trabajo muy sacrificado y complejo, ya que estás formando a las nuevas generaciones, estás inculcando valores y ayudando a los niños a crecer y ser mejores personas. "

  " La verdad, no me gusta enseñar. No tengo mucha paciencia con los niños, me cuesta mucho ser amable y tolerante, también ponerme al nivel de ellos es muy complicado, es desesperante saber lo lentos que son los niños para aprender. No quiero ser presumida, pero en verdad la diferencia entre los demás niños y yo es abrumadora. Hay que ser muy insistente y ejercitar mucho a los niños para que en verdad logren aprender. "

- " ¿Cómo ha sido tu relación con tus compañeros durante tu tiempo como profesora? ¿Te tratan como una compañera o como una autoridad? ¿Cuál ha sido la respuesta de tu curso ante tu nueva situación? "

  " Mi curso en particular se horrorizó con la idea. Ellos ya me conocen y saben que soy terrible, algunos incluso se pusieron a llorar y me pidieron que fuera buena con ellos. Los niños de los otros cursos al principio pensaron que era una broma de mal gusto, pero pronto conseguí hacerme respetar. "

  " Ante sus ojos ya no soy una niña, soy una profesora. Me tratan de usted, se ponen de pie cuando entro a la sala, y durante mis clases no vuela una mosca. Yo mantengo la compostura y seriedad, y hago como si no me afectara, pero en el fondo me hacen sentir muy mal con ese trato, porque sé que en el fondo soy sólo una niña, no merezco tanta deferencia. "

  " Además, siempre me dicen que soy muy exigente y que mis clases son agotadoras, pero también que me preocupo mucho por que los niños aprendan, que me tomo esto muy en serio. Incluso han llegado a decir que soy mejor que algunos de los profesores de la escuela... pero no, eso no puede ser verdad. "

- " ¿Cómo ha sido tu relación con los profesores? ¿Qué opinan de ti? ¿Te han apoyado en tu labor? "

- " Mucho. Responden todas las dudas que he tenido, y han tenido una muy buena disposición para ayudarme, sobre todo en el tema de la planificación, pues para mí resultó ser lo más complicado. En particular estoy muy agradecida de la profesora Cecilia Zubeldía y del profesor José Joaquín Otarola; ellos han sido mis mayores aliados en esta labor. La señorita Zubeldía en particular es muy humilde, y dice admirarme mucho. Y yo la admiraba a ella antes de que todo esto pasara. "

- " ¿Sabes? Yo también estuve en esa escuela antes de la enseñanza básica. Iba en el curso de tu hermano Hugo. No tuve clases con la profesora Arrigorriaga, pero sí con esos dos profesores. A la profesora Zubeldía le decíamos " La bruja Cecilia ". Era muy buena profesora, pero también algo extraña, a veces nos contaba unas historias muy disparatadas. El profesor Otarola era alto, flaco y de ojos saltones. Daba mucho miedo, pero era buena persona. "

- " Sí, Hugo me ha contado. "

- " ¿Te ha dicho algo sobre mí? "

- " Er... ah, me contó que habían dos niñas en su curso que eran las más mateas. Una de ellas tenía el pelo castaño claro, era blanca como la nieve, y siempre tenía las mejillas coloradas. Supongo que esa eras tú, aunque nunca me dijo tu nombre. "

- " ... Ni mi nombre sabía... "

- " ¿Ah? "

- " Er... ¡No, nada! Para terminar... dinos ¿Cómo te sientes? ¿Te gustaría continuar haciendo clases, o no hallas la hora de que llegue un profesor de verdad y así volver las cosas a la normalidad? ¿Has considerado la posibilidad de estudiar Pedagogía? ¿Si no, qué te gustaría estudiar en la Universidad? "

- " La verdad es que me he estado acostumbrando a ser profesora. Es algo que puedo hacer, y me está yendo bien con los niños. Pero no está bien que siga en esto, debería llegar un profesor cuanto antes. Además que, como ya dije, no me gusta. "

  " Y no, no me gustaría estudiar Pedagogía. He pensado en varias opciones, pero podría estudiar Medicina, quizás Pediatría... o tal vez Ingeniería o alguna ciencia exacta como Matemáticas o Física. Ingeniería Comercial también podría ser... pero no estoy segura, todavía no me decido. Todavía soy muy pequeña para esas cosas... "